Te sentaste a esperar la llamada… esa que no llegaba
Intentabas no mirar el teléfono, pero era imposible concentrarte.
Todo el día esperando, esperando y al llegar la noche seguías esperando. ¿Cómo es posible ser tan idiota? Te repetías mil veces… pero tonta de ti, sabes que al despertar, volverás a esperar y a esperar. Hasta que al fin un día te canses. Pero ¿sabes? El teléfono sonará, sonará, sonará… ring, ring, ring…
Intentabas no mirar el teléfono, pero era imposible concentrarte.
Todo el día esperando, esperando y al llegar la noche seguías esperando. ¿Cómo es posible ser tan idiota? Te repetías mil veces… pero tonta de ti, sabes que al despertar, volverás a esperar y a esperar. Hasta que al fin un día te canses. Pero ¿sabes? El teléfono sonará, sonará, sonará… ring, ring, ring…
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