viernes, 25 de septiembre de 2015

La sequoia

La gigantesca sequoia debía llevar allí miles de años. A alguien se le ocurrió aprovechar su caída para hacer ese puente natural y no deshacerse de ella. Decidieron no hacer leña del árbol caído... y nosotros pensamos parar a tomar unas fotos. Seguíamos a rajatabla las normas del parque. ...son muy estrictos en su labor de conservación, algo que nos pareció admirable desde el principio. Pero no se le ocurrió otra cosa que subirse al capo del coche para que le hiciera una foto debajo del gran árbol... la foto perfecta. ..pero la caída que se pegó... cada vez que me acuerdo... su brazo roto, ni un alma a quien pedir ayuda... sin cobertura... aquel calor... le sujeté como pude con mi foulard e intenté moverme buscando cobertura o con la esperanza de ver a algún guarda forestal...¿Quién me iba a decir a mi que iba a aprender a conducir en California?... ganitas de matarlo en esos momentos, María.... "no te rías que me haces reír a mi también y creo que aún no le he perdonado los días de hospital, las horas de quirófano... Que no te rías María, que no te rías, coño"

No hay comentarios:

Publicar un comentario