|
Imagen de Black Shadow. |
Tenía preparada la barca por si te atrevías a cruzar. Preferiste quedarte en la orilla observando nuestro mar. Nunca te decidiste a lanzarte. Solté amarras. Yo navegando sin rumbo, tú en tierra firme. Pero, ninguno, ninguno dejó de llorar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario