La barca

Imagen de Black Shadow.

Tenía preparada la barca por si te atrevías a cruzar. Preferiste quedarte en la orilla observando nuestro mar. Nunca te decidiste a lanzarte. Solté amarras. Yo navegando sin rumbo, tú en tierra firme. Pero, ninguno, ninguno dejó de llorar.

¿Los hombres no lloran?

No hagas caso de esas viejas, los hombres sí lloramos. Tienes derecho a llorar Juanito, las penas hay que sacarlas afuera. Siempre dicen lo mismo: “los hombres no lloran, compórtate como un hombre”. Pero si no sacamos las lágrimas se nos pudren por dentro. Tal vez ahora no lo entiendas pero, quiero que aprendas la lección. Y no te digo que llores porque seas un niño, yo soy un hombre, y si tengo ganas de llorar como hemos hecho hoy, lo hago. 

Ceferino Ojeda Artiles. Derechos de autor

Es dura la vida, aunque no creas que todo será así, siempre arrastraremos el dolor pero, habrá alegrías y hasta puede que algún día las lágrimas sean de felicidad. Sé que no tenemos consuelo y que estamos muy tristes, hemos perdido, las pérdidas no son buenas. Anda vamos levanta la mirada, apoya bien los pies en el suelo, no sea que los ojos empañados nos hagan tropezar. Tenemos camino que andar y nos apoyaremos el uno en el otro. Hoy una mujer muy importante se nos ha ido. Mañana serán amores, frustraciones, rabia, ira e impotencia... En unos pocos años me llevarás tú de la mano, y quien sabe si me dirás con paso firme y decidido que los hombres sí que lloramos.©

Mustia

Agnes Cecile.

Hoy estás mustia y no paras de llorar, unas veces de forma visible, otras, la mayoría de las veces, con esa lánguida mirada que te caracteriza y que te ahoga por dentro. No debes niña medir su amor por el que sientes tú. Las mujeres somos diferentes, sentimos diferente, pero diferente no quiere decir más. No se puede medir el amor, no se puede pedir que reaccionen igual a nosotras mismas. Cada persona tiene su concepto del amor, siente a su manera, incluso cada mujer es diferente frente a las otras. Los sentimientos son algo personal, por eso, lo llaman amor. Es una palabra preciosa, una palabra tan chica que lo engloba todo. Corazón y cerebro van unidos, nadie puede engañar, negar, ni disimular el amor. Puedes controlar la pasión, puedes doblegar al dolor, pero nunca, nunca podrás vencer al amor.

Procuro

Imagen de Google.

Procuro no llorar pero, si lo hago dejo que las lágrimas caigan libremente.

Las lágrimas, como la lluvia, se secan tarde o temprano. Limpian y renuevan... y además aunque parezca que no, siempre llegan a tiempo.©

Musas

Una quiso quedarse para siempre en su poesía... la otra sólo pretendía hacerlo en su vida y perdió... prefirió el poeta a la musa irreal, a la niña a la que llorar... así siguió haciendo poesías, pero nunca entendió que sus poemas eran siempre iguales, repetitivos, aburridos. .. las musas estaban bien siempre que fueran muchas.

Frío

No te preocupes que ni la verás llorar... es fuerte como un roble... echarás de menos los besos durante la lluvia, resguardados en el viejo café. Echarás de menos sus caricias inoportunas que tanto te molestaban. Echarás de menos tantas cosas, que ni aún teniéndola de nuevo dejarás de tener frío, ese frío que se apoderó de tu alma, cuando dejaste que se marchara.

Tu él

Si algún día te pones tonta y nostálgica te recordaré por qué te marchaste. Si te entra la melancolía mencionaré su nombre y dejaré que titubee su sonido en tus tímpanos. .. añadiré un par de frases lapidarias de esas que alguna vez pronunció y entonces haré que entiendas por qué la vida lo puso en tu camino y que no fue ella la que te lo quitó... fueron sus tristes mentiras, su falsa adoración.

Deja que el tiempo te cure y el recuerdo acuoso llene tus ojos de lágrimas antes de festejar que siempre vale la pena el amor, aunque el amor te lastime.

No dejaré que dejes de creer en ti, porque no eres tú quien falló....tú siempre tendrás tu amor y él siempre será tu él en el fondo de tu corazón.